Mucho más allá de una litera, que es la imagen más tradicional de una cama alta, actualmente, en los hogares contemporáneos, pueden verse soluciones más novedosas para aprovechar el espacio, y una forma rápida de duplicarlo es elevar la zona de descanso.
¿Cómo podemos hacerlo? La verdad es que ayudarán unos techos altos, pero no son un requisito imprescindible si sabes calcular bien el espacio que necesitas para poder hacer la cama y levantarte (o levantarse) con comodidad.
Sobre un armazón de madera, de obra, metálico o suspendidas del techo, las camas elevadas son la solución para disponer de todo el espacio que la cama ocuparÃa sobre el suelo. Para espacios reducidos y con poca necesidad de obra, lo mejor son las estructuras metálicas. Además, son muy apropiadas para estilos minimalistas o industriales, y, por qué no, también en ambientes decorados al estilo moderno.
Puedes situar debajo una zona de trabajo, de estudio, de lectura, y si es un apartamento pequeño o un loft ganar algo de intimidad sin necesidad de hacer divisiones que acorten visualmente las estancias e impidan el paso de la luz.
Si la escalera no fuera del tipo escalera de mano, puedes aprovechar el espacio que te queda bajo el hueco para colocar zapatos, libros o cajas con pequeños objetos de escritorio, accesorios, o ropa fuera de temporada.
Ya sabes: si en tu hogar los metros son escasos y el espacio un valor al alza, puedes ganar todos los metros que quedarÃan desperdiciados bajo las camas con un resultado decorativo muy original.
Fuentes: Guiadecoracion, MiBaobab